El León Curioso

viernes, 12 de junio de 2009

Palacio de Torreblanca

Hacia 1672 el regidor perpetuo de Leon y de Medina de Rioseco, Don Alejo Olmos Pimentel manda levantar una casa en la que entonces era la Plazuela del Teatro, ya que en ella estaba ubicado el Patio de Comedias de la ciudad.


En 1693 el sobrino de éste, Don Alejo Olmos Quiñones y Girón, marqués de Torreblanca aparece ya como propietario del inmueble, y así permaneció, en poder de este marquesado, hasta que en 1759 cambió de titularidad, pasando a formar parte de las propiedades de Bernardo Escobar, Señor de Cembranos.


En 1810 la casa fue totalmente saqueada por el ejército francés, que se llevó incluso los muebles.

Eusebia se casó en 1845 con Pedro de Balanzategui, militar vasco que llegó a ser alcalde de León en dos ocasiones, y fijaron su lugar de residencia en el palacio leonés, excepto en la época veraniega, que se trasladaban a Cembranos donde la familia tenía otro palacio.


Pedro de Balanzategui es fusilado en 1869, y su familia (la viuda y el hijo) empieza a sufrir dificultades económicas. Así, el 4 de marzo de 1874 vendieron el palacio al presbítero capellán del hospital de San Antonio Abad, Don Juan Balanzategui Olate por 31.667 pesetas. A partir de ese momento el edificio dejó de tener carácter residencial y empezó a tener diferentes usos, sufriendo profundas remodelaciones.


En 1883 se arrendó el palacio al Estado por doce años y 3.000 pesetas de renta anual, y allí se instalaron las oficinas de Gobernación y Fomento, y el telégrafo.


Don Juan Balanzategui murió en 1891 y dejó en herencia el palacio de Torreblanca a su hermana, doña Victorina Balanzategui, vecina de San Sebastián, que le alquila el palacio a la sociedad “El Casino”. Esta sociedad recreativa lo remodela nuevamente y añade un piso en el espacio comprendido entre las dos torres.


Por fin, el año 1921 los responsables de la sociedad Nuevo Recreo Industrial compran este antiguo palacio a doña Victorina por 175.000 pesetas. Pagaron 75.000 pesetas de entrada y las 100.000 restantes en plazos anuales de 25.000 pesetas. En 1924 y después de realizar nuevas reformas, el Nuevo Recreo Industrial traslada aquí sus salones sociales, ubicados hasta entonces en la calle La Paloma.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante

rubo dijo...

Interesantismo post como siempre.
Un gran trabajo el de tu blog.

José A. Crespo dijo...

Me ha gustado mcuho tanto las fotos como el texto. Cuando quieras te lo enseñare por dentro y muchas gracias por contribuir a difundir la historia de León a tavés de las pequeñas historias que se han vivido en sus edificios.
José Antonio Crespo. Presidente del Nuevo Recreo Industrial.

El León Curioso dijo...

Gracias por vuestros comentarios.
José Antonio, estoy convencido que en este edificio en concreto es en uno de los que se han vivido más "pequeñas historias" de todo León.
Si sus paredes pudieran hablar, seguro que nos sorprenderían.

Muchas gracias por tu ofrecimiento para visitarlo, cualquier día me paso por ahí.

Mariano dijo...

Gracias por la anotación.
Acabo de descubrir este blog hoy mismo y solo he visto con detenimiento un par de anotaciones; pero estoy encantado. Y en este caso concreto más aun; la de sesiones de cine dominical que habré pasado en ese edificio, claro que de eso hace ya cuarenta años.
Añade a eso que llevo más de veinte fuera de León, y comprenderás el encogimiento de corazón que se me produjo.

Pues eso, desde la emoción, mi más sincero agradecimiento.

El León Curioso dijo...

Gracias por tu comentario Mariano.

Me produce una gran satisfacción que algo de lo que se publica en este blog te traiga buenos recuerdos.

Un saludo y sé bienvenido.

Unknown dijo...

hola¡¡ muy interesante el texto ,buenas fotos ,una vez escuche una historia de unos conde de apellido torreblanca de españa que hulleron del pais por que los querian matar motivo el cual no se ..el punto es que quisiera saber si este palacio pertenece a estos condes,si no es mucha molestia por favor contesteme,gracias camila argentina.

Unknown dijo...

Hola, muy interesante el texto he aprendido algo mas de mi apeklido torreblanca